Hoy conocí Curazao




la muerte me dijo que si le daba un beso en la boca
me concedería un deseo
¿en la boca? le pregunté
Si, respondió
¿Acaso no es la vigilia un fuego y todos la padecen?
¿Acaso no somos ceniza viva?
¿Refugiados del karma?
¿Peregrinos que danzan?
¿Flores marchitas del alma
Jaqueándolo todo?
No tenemos destino ni final, me
dijo la fayuta del velo negro, así que abre tu dulce boca y terminemos con esta farsa.










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