Mandela dormido

Tu me quieres casto, me quieres bien negro, me quieres oscuro cubierto de lodo
Me quieres re preto, me quieres pomada con la cara de tinta enjabonada.
Me quieres africano preso en un vil barco, barro en un agujero, perdido en la nada
Me pretendes moro, cabecita, camarada.
Me quieres negrazo de un ébano colgado, chocolate amargo de amargor frutado
Oculto en las sombras de un túnel funerario, perdido en las sombras de claustrofóbico armario. 
Me quieres morocho que arrima con choto, aquí y en la noche del terco canario,
Dices amarme loca y ciegamente, mas te veo soñar cada noche lo contrario.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Del buen amor y otras desdichas